Cirugía ginecológica da Vinci
Muchas mujeres que tienen tumores uterinos o fibromas no sienten ningún síntoma.
Los fibromas uterinos, también denominados tumores uterinos, leiomiomas o miomas, son tumores benignos (no cancerosos) que se desarrollan en, al menos, un cuarto de las mujeres.
Pueden crecer debajo del revestimiento uterino, dentro de la pared uterina o fuera del útero. Muchas mujeres no sienten ningún síntoma con tumores uterinos o fibromas. Pero para otras, estos fibromas pueden causar hemorragia menstrual excesiva (también denominada menorragia), períodos anormales, hemorragia uterina, dolor, molestia, micción frecuente y esterilidad.
Los tratamientos incluyen embolización del fibroma uterino (que encoge el tumor) y cirugía.
El tratamiento quirúrgico para tumores uterinos más a menudo implica la extirpación el útero completo, a través de una histerectomía.
Si bien la histerectomía es una manera aprobada para resolver el problema de fibromas, es posible que no sea el mejor tratamiento quirúrgico para todas las mujeres. Si, por ejemplo, espera quedar embaraza más adelante, es posible que desee considerar alternativas a la histerectomía como la miomectomía.
La miomectomía es un procedimiento que preserva el útero que se lleva a cabo para extirpar los fibromas uterinos.
Cada año, se realizan aproximadamente 65,000 miomectomías en los EE. UU.
El enfoque convencional de la miomectomía es la cirugía abierta, a través de una incisión abdominal grande. Después de cortar alrededor de los fibromas uterinos y extirparlos, el cirujano debe reparar cuidadosamente la pared del útero para minimizar la hemorragia uterina, infección y cicatrices potenciales. La reparación adecuada también es fundamental para reducir el riesgo de la ruptura uterina durante futuros embarazos.
Si bien la miomectomía también se realiza laparoscópicamente, este método puede presentar un desafío para el cirujano, y puede comprometer los resultados en comparación con la cirugía abierta.
Las miomectomías laparoscópicas a menudo llevan más tiempo que las miomectomías abdominales abiertas, y hasta un veintiocho por ciento cambian durante la cirugía a una incisión abdominal abierta.
Una nueva categoría de miomectomía mínimamente invasiva, la miomectomía da Vinci, combina lo mejor de la cirugía abierta y la laparoscópica. Con la asistencia del Sistema Quirúrgico da Vinci, los cirujanos pueden extirpar los fibromas uterinos a través de pequeñas incisiones con un alto grado de precisión y control.