Audiología

En este estudio, comprobaremos los impulsos nerviosos eléctricos que transportan el sonido desde el oído interno hasta el cerebro mediante la colocación de electrodos en los lóbulos de las orejas o detrás de cada oreja, así como en la frente. Los sonidos de chasquidos que se escuchan a través de audífonos ayudan a nuestros audiólogos a estudiar las interrupciones en los impulsos nerviosos al cerebro.

Con esta prueba, los audiólogos colocan un pequeño micrófono en la entrada del canal auditivo para medir qué tan bien están funcionando las células ciliadas externas del oído interno.

Se colocan pequeños electrodos en la cara a ambos lados de la nariz y en la frente. Estos electrodos activan los nervios faciales, permitiendo que el audiólogo mida la debilidad muscular de su cara causada por problemas tales como la parálisis de Bell.

La medición de la capacidad para oír tonos que van de menor a mayor ayuda al audiólogo a determinar el grado y tipo de pérdida auditiva.

Para ayudar a identificar el grado y la causa del zumbido de oídos, el audiólogo llevará a cabo un examen de audición completo, que también puede implicar estudios del movimiento de los ojos, la mandíbula, el cuello, los brazos y las piernas, o pruebas mediante obtención de imágenes, como la tomografía computada (TC) o la resonancia magnética (IRM), para ayudar a detectar trastornos subyacentes que causen ese sonido persistente en sus oídos.

Mediante el uso de cantidades variables de presión de aire en el conducto auditivo, la timpanometría ayuda a los audiólogos a evaluar qué tan bien funcionan el tímpano y el oído medio. Las ondas sonoras transmitidas a la membrana timpánica, o tímpano, miden la energía del sonido reflejado y proporcionan pistas valiosas sobre la causa y el grado de la pérdida de audición o el zumbido de oídos.

Esta prueba proporciona información sobre la parte del sistema de equilibrio de la que usted depende más. Se para descalzo sobre una plataforma especial y hace equilibrio en diversas condiciones, usando un arnés especial para seguridad.

Esta prueba mide el potencial eléctrico del oído interno. La ECOG detecta si existe exceso de fluido en el oído interno. Los resultados ayudan a guiar su tratamiento.

Esta prueba registra y analiza los movimientos del ojo para identificar trastornos del oído interno o del sistema nervioso central.

Esta prueba mide el movimiento del ojo para diagnosticar o descartar problemas del oído interno o del sistema nervioso central. En esta prueba, se sienta en una silla controlada por una computadora, que gira y oscila a varias velocidades. Las velocidades lentas se desplazan en un círculo completo, y las velocidades más rápidas se desplazan para atrás y para adelante en un arco pequeño. La sala de prueba está oscura, pero una cámara de filmación y un micrófono montados arriba de la silla permiten un contacto constante entre el paciente y el audiólogo.

El potencial vestibular miogénico evocado (Vestibular-Evoked Myogenic Potential, VEMP) usa electrodos para medir pequeños cambios en las contracciones musculares del cuello a fin de determinar si el sáculo, el nervio vestibular inferior y las conexiones centrales están intactas y funcionan normalmente.