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Familia y mascotas

Relaciones con socios

Una familia protectora es fundamental para un bebé sano.

Relaciones con socios

Para cuidar a su bebé, usted y su pareja se convertirán en un equipo más que nunca para mantener al niño seguro, saludable y feliz.

Una familia protectora es fundamental para un bebé sano. Por eso ponemos énfasis en la sociedad entre las familias y los profesionales de la atención médica para garantizar la mejor atención posible durante el trabajo de parto, el parto y la recuperación.

Más información sobre la atención centrada en la familia.

Madre y padre que sonríen con el bebé

Cuando con el bebé pasan a ser tres

Mantenga su relación de pareja encaminada.

Después del nacimiento de un bebé, es común que las parejas experimenten estrés. Hay más que hacer en la casa y, aparentemente, menos tiempo para hacerlo. La fatiga puede provocar mal humor, y las fluctuaciones hormonales pueden hacer que la madre se sienta triste, confundida, ansiosa o incluso deprimida.

Es fundamental la comunicación durante este período de transición. Su dinámica familiar ha cambiado, y todos en el hogar necesitan tiempo para adaptarse.

Mientras aprenden a ser padres y su bebé aprende a confiar en ustedes, es importante compartir el cuidado. Esto puede parecer aún más desafiante si está amamantando. Sin embargo, si hace una lista de todas las tareas asociadas con el cuidado de un recién nacido, descubrirá que hay muchas tareas que pueden compartirse, como cambiar pañales, bañar, calmar al bebé, lavar la ropa o preparar al bebé para la alimentación.

Ambos padres suelen estar cansados ​​al principio. Túrnense para dormir, para que no sea siempre el mismo el que se levante con el bebé en medio de la noche. Sean flexibles. Si el bebé estaba molesto durante el día, la pareja que estaba de guardia podría necesitar la noche libre, incluso si los horarios indicaran lo contrario. Negocie si es necesario y no permita que los roles tradicionales nublen sus decisiones.

La licencia por paternidad y maternidad les da tiempo a ambos padres para vincularse con el bebé. Si no obtienen la licencia por paternidad, quizás el padre pueda tomarse días de vacaciones.

Haga una lista de las tareas del hogar. Luego, priorícelas y divídalas. En lo posible, hágalo antes de que nazca el bebé. Permita que sus amigos y familiares participen. Una mano amiga en la casa puede ser fundamental cuando llega un nuevo bebé y los padres enfrentan diferentes prioridades.

Una noche de cita es una forma obvia de reconectarse. Sin embargo, no necesitan estar en una cita para pasar tiempo de calidad. Si un amigo les trajo la cena después del nacimiento del bebé, compártanla en la misma habitación. No importa si es en el dormitorio junto al moisés. El objetivo es estar en el mismo espacio, compartir una actividad, tener una conversación y mantenerse conectados.

Mientras el bebé duerme, hablen sobre su día o miren la misma película. También pueden compartir tiempo juntos mientras el bebé se alimenta.

Su proveedor de atención médica hablará con usted sobre los horarios. Evite las relaciones sexuales mientras todavía está sangrando para prevenir infecciones. También necesitará tiempo para sanar.

Si desea tener otro bebé en poco tiempo, tenga en cuenta que los proveedores de atención médica generalmente recomiendan esperar al menos 19 meses entre embarazos para proteger su salud y la del próximo bebé. Si no desea quedar embarazada, necesitará un método anticonceptivo, incluso si está amamantando y no tiene el período.

Por distintas razones, algunas madres primerizas pueden sentirse avergonzadas. Recuerde que se necesita tiempo para perder el peso que ganó durante el embarazo. Este el momento de que los miembros de la pareja elogien genuinamente las contribuciones, los logros y las características únicas del otro.

Más de la mitad de las madres primerizas experimentan depresión puerperal o ansiedad. Si dura más de dos semanas, hable con su médico. La depresión puerperal (postpartum depression, PPD) puede durar desde los días inmediatamente posteriores a dar a luz hasta un año. Incluso puede ocurrir antes de que nazca el bebé.

Los síntomas incluyen los siguientes:

  • Sentirse deprimida casi todos los días.
  • Perder interés en lo que antes disfrutaba.
  • Dormir demasiado o muy poco.
  • No interesarse por su apariencia.
  • Sentirse inquieta o enojada.

Consulte a un consejero si siempre está preocupada, tiene pensamientos aterradores, o revive repetidamente el estrés y el dolor del parto. Los medicamentos y la psicoterapia pueden ayudar.

Christiana Care se ha asociado con Smart Patients para crear un recurso de grupos de autoayuda en línea para mujeres embarazadas y madres primerizas con depresión o ansiedad. Puede hacer preguntas y compartir historias con otras mujeres que saben por lo que está pasando.

Un nuevo bebé puede exacerbar una relación abusiva. La Línea Directa Nacional contra la Violencia Doméstica tiene consejos útiles para mantenerse a salvo durante el período posterior al nacimiento del bebé.

El Centro para el Bienestar Emocional de las Mujeres de Christiana Care cuenta con especialistas en salud conductual licenciados, altamente calificados y atentos. Para obtener más información, llame al 302-733-6662.

Si siente que es una amenaza para usted, su bebé u otras personas, llame al 911 o vaya a la sala de emergencias de Wilmington Hospital o de Christiana Hospital.

Para obtener más información:

Delaware 211 brinda acceso gratuito a programas, servicios e información para la comunidad local.

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