1 alerta activa Mostrar

Uroginecología

Fístula genital

Obtenga ayuda para las fístulas genitales.

La cirugía puede ayudar

La cirugía puede abordar los síntomas embarazosos.

Una fístula es una abertura entre dos órganos que normalmente no se comunican entre sí. Según la Organización Mundial de la Salud, más de dos millones de mujeres viven con fístulas entre la vejiga y la vagina (fístula vesicovaginal), y el recto y la vagina (fístula rectovaginal), que normalmente son causadas por un trabajo de parto prolongado y obstruido en los países en vías de desarrollo.

Sin embargo, hay otras causas, y todas las mujeres comparten síntomas que pueden ser irritantes, angustiosos y dolorosos. En los países en vías de desarrollo, las mujeres a menudo están excluidas. En cualquier parte del mundo, la pérdida involuntaria de orina o materia fecal por la vagina es embarazosa.

La cirugía puede cerrar los agujeros y ayudarla a llevar una vida normal.

Preguntas frecuentes

En los países en vías de desarrollo, la causa más frecuente es un trabajo de parto largo, especialmente si la madre es joven y tiene una pelvis sin desarrollar. En los Estados Unidos, las principales causas incluyen la cirugía pélvica, como las histerectomías y la radiación pélvica.

El síntoma principal es la incontinencia urinaria incontrolable que se filtra a través de la vagina. Puede o no tener dolor. Si desarrolla una infección, podría tener fiebre y náuseas.

El médico puede encontrar la fístula durante un examen. Las pruebas de diagnóstico adicionales pueden incluir:

  • Cistoscopia
  • Cistograma.
  • Llenar la vejiga con líquido de color para ver si se filtra hacia la vagina.
  • Tomografía axial computarizada (TC).
  • Recogida de líquido vaginal para análisis.

Una vez más, un trabajo de parto y un parto largos y difíciles son las causas más frecuentes.

Otros incluyen:

  • Enfermedad de Crohn, diverticulitis u otra enfermedad inflamatoria del intestino.
  • Radioterapia o cáncer en la zona.
  • Complicaciones de una cirugía.
  • Traumatismo vaginal.

El síntoma más aparente es la presencia de heces o gases procedentes de la vagina y no del recto. Otros síntomas incluyen:

  • Pus que proviene de la vagina.
  • Secreción vaginal con un olor desagradable.
  • Infecciones vaginales o urinarias recurrentes.
  • Irritación o dolor en la vulva, la vagina y el perineo, que es el espacio entre la vagina y el ano.
  • Dolor durante las relaciones sexuales.

El médico puede encontrar la fístula durante un examen. Las pruebas de diagnóstico pueden incluir lo siguiente:

  • Ecografía anorrectal o transvaginal.
  • Enema de metileno. Si un tampón, insertado en la vagina, se torna azul cuando se inyecta un tinte en el recto, tiene una fístula.
  • Enema de bario. El medio de contraste ayuda al médico a localizar una fístula en una radiografía.
  • Tomografía axial computarizada (TC).
  • Resonancia magnética (IRM).
  • Colonoscopia.

Dependiendo de la causa, el médico puede usar la cirugía para cerrar los orificios. Sin embargo, antes de la cirugía, su médico tratará cualquier infección.

Durante el procedimiento, el cirujano cerrará los orificios y luego colocará tejido conectivo suyo entre los orificios para evitar que se vuelvan a abrir. La zona necesita un buen riego sanguíneo para que el tejido sobreviva. Cuando la cirugía se realiza correctamente la primera vez, tiene una alta tasa de éxito.

Buscar un proveedor

Use el enlace para ver a todos los proveedores para sus necesidades específicas.