1 alerta activa Mostrar

Uroginecología

Prolapso del órgano pélvico

Encuentre alivio a la presión y el dolor del prolapso de órganos pélvicos.

Cómoda y segura

Encuentre alivio a la presión y el dolor del prolapso de órganos pélvicos.
Los tratamientos pueden fortalecer y brindar apoyo.

El dolor o la presión en la pelvis o la parte inferior de la espalda podrían ser signos de prolapso de órganos pélvicos, que afecta a una de cada cinco mujeres en los Estados Unidos, según la Oficina de Salud de la Mujer.

Debido a que el prolapso de órganos pélvicos puede provocar incontinencia urinaria o fecal, muchas mujeres se sienten avergonzadas de hablar sobre sus síntomas. Sin embargo, no es necesario que viva con el dolor. Hay una variedad de tratamientos que pueden hacer que se sienta más cómoda y segura.

Preguntas frecuentes

Como una hamaca, el piso pélvico es un grupo de músculos y tejidos de la zona pélvica que sostienen la vejiga, el útero y el cuello uterino, la vagina, el intestino delgado y el recto y los mantienen en el lugar correcto.

Cuando estos músculos y tejidos se debilitan o se aflojan, uno o más órganos pueden caer y descender hacia dentro o fuera de la vagina o el recto. La caída se conoce como prolapso.

Para las mujeres, el tipo más frecuente de prolapso de órganos pélvicos es el cistocele, que es cuando la vejiga sobresale hacia la vagina.

  • Embarazo y parto, especialmente si dio a luz por vía vaginal en comparación con la cesárea.
  • Tener sobrepeso, lo que puede ejercer presión sobre el piso pélvico.
  • Estreñimiento crónico.
  • Trabajos o actividades frecuentes que implican levantar objetos pesados.
  • Tos persistente.
  • Trastornos que afectan el tejido conjuntivo del cuerpo, como el síndrome de Ehlers-Danlos (Ehlers-Danlos syndrome, EDS).
  • Envejecimiento y menopausia. Alrededor del 37 % de las mujeres con trastornos del piso pélvico tienen entre 60 y 79 años; alrededor de la mitad tienen 80 años o más, informa la Oficina de Salud de la Mujer.
  • Una histerectomía (extirpación quirúrgica del útero).
  • Antecedentes familiares. Los investigadores están estudiando las relaciones genéticas.

Es posible que sienta que algo sobresale de la vagina o se sale de ella. Además de la presión, puede tener algo de dolor. Estas sensaciones pueden ocurrir con más frecuencia cuando está físicamente activa o tiene relaciones sexuales. Pueden empeorar al permanecer de pie durante mucho tiempo o al toser, y puede haber sangrado y secreción.

Si la vejiga se ha caído, podría tener pérdidas de orina o sensación de necesidad frecuente de orinar. Si el recto ha prolapsado, puede tener problemas para defecar, estreñimiento o incontinencia fecal.

Podría tener solo unos pocos síntomas con un prolapso significativo o muchos síntomas con una pequeña cantidad de caída. Avise al proveedor de atención médica sobre cualquier presión o dolor en la zona pélvica, independientemente de su intensidad.

Un examen pélvico detallado normalmente revelará el problema. El médico le pedirá que haga un esfuerzo o tosa. Es posible que necesite una ecografía para obtener una imagen de los órganos.

El prolapso de los órganos pélvicos rara vez es potencialmente mortal. Sin embargo, los tratamientos pueden ayudar si el prolapso le causa dolor o molestias.

En algunos casos, los ejercicios de Kegel son todo lo que necesita para fortalecer el piso pélvico. Para hacerlos correctamente, debe contraer y sostener músculos específicos. El proveedor de atención médica o un fisioterapeuta pueden ayudarla a localizarlos.

Otros tratamientos incluyen:

  • Un pesario, un dispositivo extraíble que viene en diferentes formas y tamaños. Durante un procedimiento en consulta, se inserta en la vagina para que actúe como refuerzo del órgano prolapsado. Si encaja bien, no debería sentirlo. Tendrá que retirarlo regularmente para limpiarlo.
  • Cirugía. Existen muchos tipos diferentes de cirugía para el prolapso. La decisión se basa en el órgano afectado, así como en los factores individuales de su vida. Usted y su cirujano deben analizar todas las opciones y llegar a una decisión compartida sobre la mejor cirugía para usted. Por ejemplo, puede decidir utilizar una malla quirúrgica para sostener el piso pélvico después de comentar sus riesgos, o puede elegir utilizar solo suturas y permitir que su propio tejido se repare por sí solo.
  • Los médicos en el Centro de Urología y Cirugía Pélvica de Christiana Care están certificados por la junta en obstetricia y ginecología, y son los únicos uroginecólogos de Delaware certificados en medicina pélvica femenina y cirugía reconstructiva. Casi el 100 % de las cirugías son mínimamente invasivas, lo que da como resultado un tiempo de recuperación más rápido.
  • Pierda peso, si es necesario, para reducir la presión sobre el piso pélvico.
  • Deje de fumar, lo que puede causar tos crónica.
  • Siga una dieta nutritiva para evitar el estreñimiento.
  • Haga ejercicios de Kegel.

Además, analice cualquier síntoma con el proveedor de atención médica, sin importar lo incómodo que sea. El prolapso de los órganos pélvicos tiene tratamiento y no es necesario que sufra.

Buscar un proveedor

Use el enlace para ver a todos los proveedores para sus necesidades específicas.